jueves, 9 de enero de 2014

¿Whisky con hielo?

He visto en las frescas noches de Barranquilla algunos bares tipo pub con decorados y pisos de madera que, en protesta frontal al paso de la brisa, permanecen con puertas y ventanas cerradas; por ende, deben hacer uso de grandes sistemas de aire acondicionado para mitigar el subsiguiente calor. He visto en la cálida ciudad de Barrancabermeja algunas casas cuya arquitectura está diseñada para aguantar las gélidas temperaturas escandinavas; incluso sus techos están diseñados para que la nieve pueda deslizarse con facilidad. He visto a entusiastas muchachos Cartageneros, fanáticos de la cultura hip hop, caminando sudorosos debajo de pesadas chaquetas de grandes letras y usando pasamontañas con 32 grados celsius. Y he visto también a criollos pontificando de la correcta manera en que se debe tomar el whisky.

Somos muy dados a tomar postulados populares como verdaderos sin tomarnos el trabajo de verificar. Es así como hemos extendido el mal uso de las palabras "cursi" o "bizarro" a pesar de contar con diccionarios online. También le hemos atribuido la frase "el fin justifica los medios" a Maquiavelo sin haber leído siquiera El Príncipe. De igual manera nos hemos burlado de "es mejor ser rico que pobre" de Pambelé aunque Alberto Salcedo Ramos, profundo conocedor de la vida del Kid, haya desmentido este rumor en diversas ocasiones. Y es así como repetimos que el whisky se toma solo porque con hielo se arruina. 

Como yo no soy experto en nada, pero sí un poco observador, he visto la forma en que muchos de los que defienden este último postulado se toman el whisky: sacan la botella del congelador o del interior de un recipiente con hielo, sirven un trago corto en un vasito alargado y apuran el contenido directo hasta la garganta arrugando la cara por el picante amargo del alcohol, si se me permite la figura.

Pues bien, he consultado en internet la opinión de varios expertos. Lo que dicen, en resumen, es que el whisky se debe tomar es como a uno le dé la gana. Cosa que ya se sabía, pero ajá. Sin embargo cada uno de estos expertos abordan el tema en cuestión y exponen varios puntos. El primero es que ellos recomiendan tomar los dos o tres primeros tragos puros para sentir el sabor original de la barrica; luego recomiendan agregar un poco de agua mineral con el objetivo de que el whisky se "abra" y deje apreciar nuevos matices, aromas y sabores. No sé si me equivoque, pero si uno se toma un trago de whisky de la forma en que lo describí hace un momento, está más que claro que se está muy lejos de apreciar cualquier matiz, sabor o aroma. De hecho, después de la segunda botella no se alcanza a apreciar siquiera el estado propio de consciencia.

Lo segundo es que a muchos de los whiskys, los de mayor nivel de alcohol, les agregan agua en las propias destilerías antes de embotellarlos para bajarles la concentración y "abrirle" matices. Es decir, que desde antes de abrir la botella ya se les ha caído el argumento a los eruditos de cartón.

Por último los expertos concluyen que, en efecto, con hielo el whisky pierde su fuerza en cuanto a matices, sabor, aroma y hasta el color. Pero ojo, no pierde fuerza porque el hielo se diluya en él, sino porque le baja la temperatura. Es la temperatura lo que arruina el whisky. Entonces bien pueda estimado amigo, saque la botella del congelador, póngala 2 minutos a fuego lento en un baño maría y siga pontificando que "el whisky se toma solo porque con hielo se arruina".